Sabes cuántas veces personas allegadas y otras no tanto, me han dicho:
- “Ay! pero tú tomas vino?”
- Y yo digo: clarooo…!!!
- “Ahhh…!!! en Ayurveda se puede tomar vino?…”
Ayurveda es acerca de tu balance. Se trata de sumar a tu vida más de lo que te hace sentir bien y restar lo que te hace sentir mal. Es una ciencia de sugerencias, no de imposiciones, busca que tu mismo te hagas consciente de qué pasa cuándo te tomas una copa de vino y qué pasa cuándo te tomas la botella entera. Ayurveda te invita a descubrir y llevarte divino con tu armonía.
Ahora a lo personal, si yo no pudiera tomarme un vinito, divertirme socialmente, conversar acerca de temas distintos a salud o hablar paja (hablar de cualquier tema poco relevante), como decimos en lenguaje coloquial venezolano, no estaría alineada con “mi” balance personal, entraría entonces en modo “cárcel saludable y/o ayurvédica”, por decirlo de algún modo en dónde “TENGO QUE” vivir de una manera 24/7 o no me puedo considerar “saludable”. Esto no me serviría, ¿sabes por qué? Porque me sentiría vigilada, juzgada y evaluada por mi misma, que soy la más dura de las carcelarias.
Gracias a Ayurveda he aprendido a diseñar un plan de vida de acuerdo a mis cualidades únicas, esas que me hacen muy particular, y desde ese lugar vivo hoy en día, pero quiero compartir contigo que lo hago desde un sitio de mucho balance y no desde el extremismo o el fanatismo.
He mejorado mi estilo de vida exponencialmente. Ayurveda me ha enseñado que la mejor manera de transitar un camino saludable es con balance y ello puede incluir unos vinitos (no una botella), acostarme tarde un día por quedarme bailando y riendo con amigos y eventualmente comer algo que no sea taaan saludable. Lo importante hoy, es que los vinitos, el trasnocho y lo no taaan saludable forman parte de la excepción y no de la regla; que vivir en la regla te hace sentir increíblemente armónico y pasear por el camino de la excepción es una gozadera que me la disfruto al máximo con el mejor balance posible!